Consejos para un Roast-beef jugoso
Para los amantes de la carne el roast beef (o rosbif) bien cocinado es un plato exquisito, jugoso, tierno y de gran sabor. Ofrece muchas posibilidades y admite gran variedad de guarniciones y usos: comidas, cenas ligeras, aperitivos rápidos, en bocadillos o sándwiches…
Aunque es un plato sencillo de cocinar os vamos a dar algunos consejos básicos para conseguir un roast beef perfecto:
Una pieza de calidad ya sea de ternera o buey, garantiza un buen resultado. Hay que escoger piezas tiernas y mejor con vetas de grasa intramuscular. También es conveniente que la pieza de carne que escojamos tenga una capa de grasa externa que aporte un extra de jugosidad.
Los cortes más adecuados para preparar el Roast-beef son el lomo (alto o bajo), la espaldilla, el solomillo, el redondo…
“Aderezos”
Estas piezas necesitan pocos aderezos, con una condimentación básica de sal y pimienta sería suficiente. Frotaríamos toda la superficie unifórmenme.
Si nos gusta variar podemos añadir especias secas (romero, tomillo…) mezcladas con sal y azúcar que aportaran un toque dorado y caramelizado al exterior.
“El asado”
Para un asado correcto la pieza de carne ha de estar a temperatura ambiente antes de pasar al horno. Entre una o dos horas (dependiendo de la poca del año) fuera del frigorífico será suficiente.
Mejor poner la pieza de carne sobre una rejilla con una fuente debajo para recoger los jugos.
Para que se ase la carne uniformemente y no se reseque conviene regar la pieza frecuentemente con los jugos.
La temperatura del horno es muy importante, los primeros 15 minutos estará a 200ºC, después bajaremos la temperatura a 180ºC hasta el final del asado. Calculando unos 15 minutos por cada kilo de peso para «poco hecho», 17-18 minutos para «al punto» y 20-22 minutos para «bien hecho».
Como vemos el punto final del asado puede variar según nuestro gusto pero es cierto que es difícil calcular y los tiempos dados anteriormente son orientativos. Lo mejor es utilizar un termómetro de carne que insertaremos en la parte central de la pieza de carne por el lado más grueso.
Estas son las temperaturas internas de la carne y el punto final que obtendremos:
Muy poco hecho—45ºC
Poco hecho———- 50ºC
Antes del punto—-55ºC
Al punto—————60ºC
Pasado del punto—65ºC
Bien hecho————70ºC
Si nos gusta la carne sonrosada toda por igual deberemos asar la pieza de carne a baja temperatura (95ºC) durante un tiempo prolongado (entre 3 y 5 horas) Con esta forma de asado no tendremos un exterior crujiente
“El reposo”
Finalizado el tiempo de asado es muy importante dejar reposar la carne unos 20 minutos. Este reposo permitirá que los jugos se asienten el interior consiguiendo un Roast-beef más jugoso.
Estamos seguros que después de leer este post estáis perfectamente preparados para preparar un rico Roast-beef.
Estamos seguros que vosotros también tenéis algún pequeño truco para mejorar esta receta, ¡cuéntanoslo!